Las gentes de Izquierda Unida hemos visto cómo durante el pasado fin de semana se producía un revulsivo organizativo, una gran movilización interna y externa. Las gentes de Izquierda Unida ya hemos perdido la paciencia y vamos a poner todo nuestro empeño en frenar las medidas neoliberales impuestas por el “consenso de Bruselas” que, en España, representa el Gobierno de Zapatero. Vamos a trabajar como nunca para que las movilizaciones convocadas por los sindicatos de clase sean un éxito. Vamos a garantizar que la Huelga General del 29 de septiembre pare las medidas de ajuste y los recortes contra la mayoría social trabajadora.
Comenzamos los debates el viernes 25, en la Biblioteca de la Universidad Complutense de Madrid, en el debate “Ante la crisis, refundamos la izquierda en Europa”, en el que participaron representantes de partidos de la izquierda europea, donde hubo un análisis muy compartido de la realidad de los diferentes países, y cuyo principal reto fue el de articular un método de trabajo que permitiera seguir compartiendo análisis y alternativas, y, fundamentalmente, coordinar las movilizaciones que se estaban dando en toda Europa por los recortes sociales y la pérdida de derechos.
El sábado 26, más de 900 personas nos encontramos en Fuenlabrada, en la I Asamblea de Refundación, para discutir y hacer propuestas para ese programa convergente. Por primera vez, Izquierda Unida organizaba una Asamblea en la que sólo y exclusivamente se iba a hablar y discutir de política, de acciones políticas, de medidas alternativas contra la crisis, y la asistencia fue masiva, tanto que nos faltó tiempo para seguir discutiendo y proponiendo. Concluimos el encuentro con el espíritu de continuar con este trabajo que tanta ilusión y expectativas estaba creando entre la militancia de Izquierda Unida, pero también entre las que pertenecían a otras organizaciones sindicales y políticas, y las muchas personas que a título individual participaron.
Tuvimos la suerte de contar, entre otros, con Samir Amin, quien en un discurso emotivo y sincero, en el que habló de la necesidad de crear un gran frente amplio de resistencia al capitalismo, creando y dando a conocer las alternativas, nos expuso su análisis del estado de la crisis capitalista y nos recordó que en el caso español “el Partido Popular y el PSOE eran dos ramas del Partido Único, el Partido del Capital”.
Salimos con muchas energías de la Asamblea, dispuestos a seguir trabajando en la convergencia política y social, animadas y animados por el éxito que había tenido la militancia de Izquierda Unida y dispuestas a que la manifestación del domingo 27 en Madrid fuera un éxito.
Y lo fue, quince mil personas por las calle de Madrid, demandando la creación de empleo y una alternativa social a la crisis, gritando contra las medidas adoptadas por el gobierno del PSOE y el del PP en Madrid. Quince mil personas que decían, oye, aquí estamos, hemos venido para quedarnos, porque la calle es nuestra y de aquí no nos vamos hasta que exista una verdadera democracia que gobierne los mercados. La Plaza Mayor de Madrid se llenó de banderas de Izquierda Unida, del Partido Comunista, de banderas republicanas, pero también había otras muchas banderas, repleta de personas mientras se desarrollaba el acto público.
Pero esto no ha hecho más que empezar, seguiremos trabajando para ser cada vez más y más fuertes, para hacer conocer nuestras propuestas, para movilizarnos contra las medidas neoliberales que los gobiernos del PP y el PSOE nos quieren imponer, porque no queremos que paguemos quienes no hemos generado esta crisis, porque no lo vamos a permitir.
La movilización ha comenzado, la información y la agitación de nuestras propuestas no van a parar, nos constituimos en rebeldes contra el capital, y así lo hemos demostrado durante el fin de semana del 25 al 27 en Madrid, porque la Unión no hace la fuerza, la multiplica.
