El presidente del Grupo Parlamentario de IU, ICV-EUiA, CHA, Cayo Lara, ha respondido al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, durante la comparecencia de éste en el Congreso para explicar el contenido de la última cumbre europea que “usted ha comprometido en Bruselas la firma de un Tratado que sacraliza las medidas que han fracasado, que consolida la ideología neoliberal en el proceso de construcción europea y en nuestra Constitución. Respaldar estas reformas es un ‘corsé de hierro’ que estrangula el ya escaso Estado del bienestar”.
Lara resumió con claridad qué significará para nuestro país el cumplimiento estricto y sin alternativas de la hoja de ruta marcada por los gobiernos conservadores de la Unión Europea y aseguró que se traducirá en un escenario de “recesión, depresión y desesperanza”.
Para Lara, “esta nueva reforma supone una vuelta de tuerca a los Tratados de Maastricht y de Lisboa. Entonces se fijó un tope del 3% de déficit público sobre PIB, que han traído más paro, más precariedad, más pobreza y nuevos recortes para los servicios públicos. Ahora se nos impone un drástico 0,5%, que nos conduce a la austeridad ‘sine die’ y a un mayor declive económico”.
El también coordinador federal de IU recordó de forma muy directa a Rajoy que mientras el Ejecutivo que dirige ha decidido abrazar en todos sus términos los postulados europeos del recorte y del ‘ajuste duro’ “uno de sus lemas en campaña electoral fue ‘Lo primero, el empleo’, sin embargo, su Gobierno no ha tomado ni una sola medida encaminada a la creación de puestos de trabajo. Ni su reforma financiera, que en el mejor de los casos retrasaría una mayor disponibilidad de crédito hasta en dos años, ni la anunciada reforma laboral que sólo recortará derechos a los trabajadores, servirán para crear empleo”.
Responsabilizó del grave deterioro del mercado de trabajo a las viejas políticas económicas con un modelo productivo insostenible basado en el ‘ladrillo’ y la especulación inmobiliaria seguidas por los anteriores ejecutivos del PP y del PSOE. Pero no perdió de vista el día de hoy al advertir al líder del PP que la cifra del paro de enero “ya es de su Gobierno” y que las medidas de ajuste y la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores ahondan en la recesión y el desempleo.
“Este país –resumió Cayo Lara- se está desangrando y es necesario actuar ya”. Por el contrario, la línea marcada por el Ejecutivo de Rajoy demuestra cada vez de forma más clara que “sólo con austeridad no se saldrá de la crisis. Lo que los ciudadanos esperan del Gobierno son respuestas a sus preocupaciones cotidianas. Si seguimos sin darles estas respuestas, se seguirá deteriorando la confianza en las instituciones políticas, tanto en las españolas como en las europeas. Esta reforma del Tratado aspira a recuperar la confianza de los mercados, ¡pero no podemos perder en el camino la confianza de las personas!”
Lara no se quedó sólo en la crítica y reclamó al presidente del Gobierno que la ratificación del nuevo acuerdo sobre el pacto fiscal “se someta a referéndum popular” para que los ciudadanos “puedan decidir” respecto a su contenido. No obstante, lamentó el “mal precedente” que supone la reforma urgente de la Constitución Española del verano pasado, pactada por PP y PSOE.
Además, adelantó que “nuestro grupo tomará las iniciativas políticas que sean necesarias para blindar el gasto social en los Presupuestos Generales del Estado, los de las comunidades autónomas y de los ayuntamientos”.
El portavoz del grupo de IU, ICV-EUiA, CHA señaló rotundo que “sí hay otras salidas a la crisis”. Reiteró su ofrecimiento para celebrar en el Congreso un “Pleno monográfico sobre el empleo” y “nuestra disposición a participar en una amplia Mesa con todas las fuerzas políticas y sociales para poner las bases a un nuevo modelo productivo que propicie una salida social a la crisis”.
Cayo Lara concluyó su intervención detallando una batería de propuestas y prioridades que evidencian cómo es posible dar respuesta a la grave situación económica que atraviesan tanto la UE en su conjunto como nuestro país:
1- Modificación de la normativa que regula el Banco Central Europeo (BCE) con el fin de que pueda comprar directamente deuda pública a los países de la eurozona sin intermediación bancaria.
2- Que el BCE proceda a la emisión de eurobonos, con un interés equivalente al del precio oficial del dinero.
3- Que el BCE facilite recursos financieros al Banco Europeo de Inversiones y a las instituciones públicas de crédito, como el ICO. Hay que constituir un Fondo Europeo para el empleo y la inversión que contribuya realmente a la creación de puestos de trabajo.
4- Es imperativo solicitar una moratoria para alcanzar los objetivos de déficit propuestos, que debe llegar, al menos, hasta el final de esta legislatura.
5- Proponemos un impuesto sobre las transacciones financieras internacionales y formular un nuevo marco regulador financiero que ponga las finanzas al servicio de la economía real. No es de justicia que los causantes de la crisis salgan de ella embolsándose miles de millones en primas y que sean los contribuyentes quienes paguen la cuenta de los especuladores.
6- El BCE y los bancos nacionales deben exigir a las entidades financieras que dediquen un porcentaje de crédito a empresas y familias, para que el dinero llegue a la economía real y el paro no siga aumentando.
