Tras conocer la propuesta de subida del 3 por ciento en las ordenanzas municipales que hace el equipote gobierno, y aún siendo concientes de que ese incremento equivaldría al previsto en el IPC del próximo año, con lo que sólo estaríamos equilibrando el coste de los servicios, el Grupo de Concejales de IU proponemos que para el ejercicio económico del 2012 se mantenga la congelación de todas las tasas y precios públicos que cobra el ayuntamiento, con la excepción de una baja del o,2 por ciento en la contribución urbana –ibi-, ya que en este impuesto se prevé un incremento de recaudación importante como resultado de la actualización del padrón que se está realizando.
Entendemos desde IZQUIERDA UNIDA que el esfuerzo económico realizado por el ayuntamiento y vecinos de Aguilar en los últimos años para alcanzar el estado de saneamiento que presenta las arcas municipales, nos permite que, ante la grave situación económico - social que ha generado la crisis en la mayoría de las familias de nuestro pueblo, se puedan tomar algunas medidas como la congelación de las ordenanzas y la baja porcentual en el ibi, que rebaje la presión fiscal sobre los ciudadanos
Somos concientes de que la congelación de las ordenanzas y bajada del ibi, y la previsible disminución de ingresos en impuestos como el de construcciones o Plus Valías va a suponer una reducción considerable de recursos para el presupuesto del 2012, pero entendemos que en este momento la situación social generada por la crisis nos obliga a tomar estas medidas.
Desde Izquierda Unida consideramos que la bajada de ingresos prevista debe solventarse por el Ayuntamiento con dos líneas de trabajo concretas:
1ª - Optimizando los ingresos, y para ello es fundamental que la alcaldía ponga en marcha medidas encaminadas a que, como es de justicia, todos los ciudadanos cumplan por igual con su obligación de contribuir, evitando así el agravio de que unos paguen sus impuestos y otros puedan quebrantar esa obligación,
2ª ejerciendo un exhaustivo control de gasto, para lo que hay que tomar, entre otras medidas, la de adecuar el personal del Ayuntamiento a criterios de eficacia y necesidad. No es comprensible que si se reduce drásticamente los ingresos en algunas áreas por una menor demanda de servicios en las mismas, como es por ejemplo licencias de obras y plusvalías, no se de adecue los recursos humanos de esas áreas a la nueva realidad.
Igualmente, y a tendiendo a la situación de precariedad social referida, plantemos el que se facilite todo lo posible a los ciudadanos el puedan hacer frente al pago de los impuestos municipales, y por ello proponemos que, tanto los impuestos que cobra el ayuntamiento directamente, como los que se hace a través de la empresas provinciales, Eprinsa, se gestione por la alcaldía el que sean cobrados en dos tramos, en decir, fraccionándolos en dos cuotas anuales, los que aún no lo sean.
