viernes, 25 de diciembre de 2009

TRUCOS Y MALAS ARTES


Probablemente muchos vecinos de Aguilar hayan leído la última hoja informativa repartida por UPAN, y muchos habrán constatado, una vez más, el talante intransigente de su contenido.
Izquierda Unida valora positivamente el que los Grupos Municipales informen a los ciudadanos de sus tareas, estén en el Gobierno o en la Oposición, ya que es uno de los medios para que éstos puedan participar en la vida política. Y entendemos, además, que en mayor o menor medida, esta información adolece de la directriz política de cada Partido, aunque siempre se plantee como objetiva.


Pero cuando se sobrepasa la frontera de la subjetividad, y se va más allá, utilizando maliciosamente informaciones manipuladas con el objetivo de dañar al adversario político, perdiendo el respeto a la opinión o pensamiento de éste, nos adentramos en los terrenos de la intolerancia y sectarismo, que nada tienen que ver con la acción política en un Sistema Democrático. En una palabra, para poder exigir respeto a las ideas de uno, hay primero que tolerar las de los demás, siempre que se hagan desde la LIBERTAD. De lo contrario, estamos reproduciendo hábitos de otros tiempos.

Por eso, cuando UPAN denuncia que tiene truco la propuesta de congelar la Ordenanzas Fiscales para el 2010, que fue aprobada por la totalidad del Pleno Municipal, menos los dos miembros de dicho partido, está presuponiendo una maldad que, además de ser infundada , constituye una ofensa clara a los demás miembros de la Corporación, que han votado una propuesta, acertada o no, pero tan legítima y veraz como la de bajar los impuestos que anualmente hace UPAN.

Irremediablemente, cuando se pretende descalificar al adversario político enjuiciando sus intenciones, y no rebatiendo sus propuestas con argumentos convincentes, se acaba dibujando un horizonte de fanatismo que descalifica al que así procede, y legitima moralmente al contrincante para que emplee los mismos modos, recurso del que no vamos a hacer uso por nuestra parte.

Diez años lleva UPAN planteando la reducción de impuestos en nuestro Ayuntamiento. Diez años en los que su propuesta, como ha ocurrido en el actual, se ha visto relegada a sus propios votos. Y eso ni la invalida ni la anula, solamente, los demás grupos han votado otras propuestas, y en un sistema democrático la mayoría gana, con razón o sin ella. En política es legítimo defender cada uno sus ideas, incluso desde el inmovilismo más absoluto, pero no es recomendable la creencia de que se está siempre en posesión de toda la verdad, considerando que son los demás los que tienen que cambiar el paso, cuando es más probable en estas circunstancias que sea uno el que está fuera de contexto.

Experiencias de bajar los impuestos en nuestro pueblo ya tuvimos. Y todos conocemos en que degeneró aquel populismo, como somos conscientes del coste que esta teniendo el remontar tal ruina. No pretendemos con esto relacionar la propuesta de UPAN con aquellas prácticas, sino valorar las circunstancias tan dramáticas que hemos soportado, y que sin duda ha condicionado el que la responsabilidad del gobierno de Carmen Flores, con el soporte de los demás Grupos de la Corporación, se viesen forzados, conscientes de la realidad que se imponía en cada momento, a tomar las únicas medidas posibles para sacar a este pueblo del agujero al que lo llevaron.

Y hubo que subir los impuestos con la rémora de la pérdida que provocó las bajadas señaladas, y se tuvo que llegar a extremos, como única posibilidad de entrar en Planes de Saneamiento que permitieran recobrar la esperanza de supervivencia para los actuales vecinos de este pueblo, y más importante, para las generaciones más jóvenes. Y demostraron capacidad los gobernantes de Izquierda Unida, junto con el criterio de los demás Grupos Municipales, PSOE, PA, PP, al conseguir remontar tal situación, aunque aún estemos condicionados económicamente por la misma. Y nunca, en los más de 15 años transcurridos, UPAN se ha sumado a ninguna propuesta de estas características, evidenciando desde su abstracción, la inviabilidad de cualquier entendimiento. ¿Eran las propuestas de UPAN las correctas?, pues no lo sabemos, ya que no se han llevado a cabo, y quizás se haya perdido algún criterio positivo. Por el contrario, sí se puede corroborar que el esfuerzo de los demás Grupos ha dado sus frutos, y si no del todo, sí en gran medida se ha rescatado a este pueblo de la quiebra que se le acarreó.

Tacha UPAN a los demás Grupos de incoherentes porque en años pasados defendieron la subida del IPC en las Ordenanzas y este año, atendiendo a la realidad social que ha generado la crisis, han aprobado la congelación de las mismas. Nuestra opinión es que las circunstancias deben incidir en las propuestas que en cada momento se planteen por un partido, pues el análisis de la realidad es el primer elemento a considerar en cada propuesta. Si para otros la coherencia está en mantenerse inmóviles ante cualquier planteamiento, lo respetamos, pero no lo compartimos.
Tergiversa maliciosamente la información UPAN cuando da a entender que los demás Grupos somos responsables de que el Catastro o Epremasa puedan subir sus cuotas. La propuesta aprobada en el Ayuntamiento se vincula solo con las Ordenanzas Municipales, y cierto es que si éstas se bajasen, de producirse la subida de cuotas en dichas entidades, se verían mermadas, pero no se puede responsabilizar al Ayuntamiento de las decisiones que tomen otros.
Obviamente, plantear una reducción de impuestos es la acción política más fácil siempre. Pero cuando se hace reiteradamente dicha propuesta, y a renglón seguido se plantea que hay que aumentar la inversiones, que todos los servicios públicos tienen que ser gratuitos, etc., etc., y no se explica como realizar dicho milagro, se pierde el fundamento principal que debe sustentar cualquier proposición, como es su viabilidad, y la sitúa fuera de la lógica.
Señala UPAN el incremento que se va a producir este año en el recibo del agua como consecuencia de la inclusión del canon por depuración. Y culpabiliza de ello también a los demás Grupos de la Corporación, cuando se sabe ciertamente que dicha medida obedece a las directrices europeas que señalan el año 2010 como límite para que los pueblos mayores de 10.000 habitantes viertan sus aguas depuradas a los ríos. ¿Acaso UPAN no es ecologista y defiende la preservación del Medio Ambiente?.

Gracias a la gestión de la Corporación que gobernaba en el 2003, y los demás Grupos que apoyaron la iniciativa, menos UPAN, Aguilar entró en los Convenios con la Diputación para poder construir las Depuradora, asumiendo cada Ayuntamiento el 40% del coste, más la aportación de los terrenos para construirla. Indiscutiblemente, se puede estar o no de acuerdo con que los Ayuntamientos tengan que asumir dichos costes, como los asume cuando se construye un Centro de Salud, un Instituto, etc., pero si la opción es dejar a tu pueblo sin ese servicio, está clara la postura que le queda a las Corporaciones. Si el Ayuntamiento de Aguilar se hubiese quedado fuera de dichos convenios, tendríamos que haber construido la Depuradora y mantenerla con fondos Municipales, y no hay que ser muy avispado para entender que el coste para los ciudadanos de Aguilar hubiese sido mucho mayor.

No es cierto que los demás Grupos no hayamos aceptado ninguna propuesta de las realizadas por UPAN en el pasado Pleno de las Ordenanzas. Existe un acuerdo y un compromiso de constituir una Comisión con representación de todos los Grupos, para analizar la viabilidad de implantar la progresividad en el pago de impuestos y precios públicos, en la medida que el Ayuntamiento pueda regular dichas cuestiones. También le hemos aceptado hablar incluso de su propuesta de confeccionar un callejero fiscal, aunque le hemos puesto de antemano el reparo de que dicha medida no es nada novedosa, ya que existía con los Ayuntamientos franquistas y fue suprimida con la llegada de la Democracia. Habrá que estar muy atentos, no vayamos a querer diferenciar entre los trabajadores que viven en la calle San Cristóbal, Calvario, Huerto, etc., con los que viven en la calle Cerrillo, Lorca o el Carmen, ya que para Izquierda Unida la condición de trabajador o parado nada tiene que ver con la zona del pueblo donde se habite.

Por último, no le admitimos a UPAN la pretendida lección de Izquierdismo que pretende dar a los demás, y mucho menos cuando se vale de principios que no son de su exclusividad. Se pregunta UPAN en su hoja si puede valer unos mismos impuestos a la izquierda o a la derecha. Buena pregunta para que la responda la propia UPAN, como debe dar también respuesta a la pregunta de: ¿Puede coincidir siempre un partido de Izquierdas con la Derecha en la propuesta de bajar los impuestos.

No se trata de dar lecciones de nada a nadie, pero hay máximas históricas que ni las revisiones más interesadas pueden rebatir, y una de ellas, es, que la bajada de impuestos ha sido y es una bandera que siempre ha enarbolado la derecha más reaccionaria. Y cuando ha gobernado, como ocurrió con Aznar, la puso en práctica y bajó los impuestos, a cambio de recaudar miles de millones liquidando todo el Sector Público rentable que tenía este País. Estos son los beneficios que acarrea para los trabajadores la bajada de impuestos.